También deciros que el título de este post lo he puesto en honor a mi guía de supervivencia, mi perdición, bla bla bla, "Sexo en Nueva York". Reinas del drama. Lo somos. O al menos yo admito serlo. Nos quejamos cuando no tenemos novio y nos quejamos cuando lo tenemos. Muchas veces, sin motivo aparente. Por paranoyas montadas en nuestro universo paralelo. Ahora pasamos de los hombres por estar demasiado disponibles. Nos van las relaciones caóticas. ¿Que coño nos está pasando? Si la relación va viento en popa a toda vela, mar calmado, cielo despejado, jodido. Si nos tienen en ascuas todo el puto día, aún más jodido. ¿Necesitamos un toque dramático? Es que el truco de una relación jodidamente perfecta está en... ¿el vuelco en el estómago?
Aún no consigo creerme que dentro de poco menos de 30 horas esté viendo un desfile en pleno directo. Acojonante. Buff..¡Qué fuerte, joder! En fin, fieles seguidores, dejo mis gilipolleces y me voy a terminar de ver "Le doleur exquise", mi capítulo favorito. También me comeré el último triangulito del Toblerone. Como engancha el cabrón. Pero como decia Regina Brett... "Cuando se trata de chocolate, toda resistencia es inútil..." Y qué razón tenía.
"El tiempo que no se va es aquel que ha desbordado nuestros sentidos"
-Ángela Becerra-